Conocer la organización interna de las células procariontes y eucariontes para la clasificación de las células.
¿Te has preguntado de qué estamos compuestos los organismos vivos?
El ser humano es visual. Cuando la tecnología nos permite observar con mayor detalle nuestro entorno, ponemos más atención a él. Por eso, durante el siglo XVII, con la fabricación de las primeras lentes y artefactos para usarlas, fue posible observar con detenimiento los detalles de organismos, tejidos y “poros” que son imperceptibles a simple vista para el ojo humano.
A estos pequeños “poros” se les llamó células, y cada una de ellas es la unidad más pequeña de la vida. Las células fueron estudiadas primero en el corcho, en las hojas de las plantas, en las bacterias en el agua, y posteriormente se observó, con la ayuda del microscopio, lo que había en la sangre, el esperma y los tejidos animales.
A medida que los microscopios se fueron perfeccionando se pudo captar, dependiendo de los organismos de procedencia, la diferencia entre las células. En la actualidad, en plena pandemia ocasionada por el coronavirus SARS-CoV-2, sería interesante para el ciudadano común poder observar a nivel microscópico como afecta a nuestras células este nuevo virus. Sin embargo, para comprender lo que se vería en ese caso hipotético, sólo al alcance de los microscopios electrónicos de mayor tecnología, primero sería necesario comprender los postulados de la teoría celular.
Dichos postulados son la base de la teoría celular moderna. Fue posible enunciarlos al observar y comparar en reiteradas ocasiones las células que componían distintos tipos de organismos. Lo que permitió clasificarlas de acuerdo con su estructura interna.
Con motivo de la contingencia sanitaria en la que se encuentran México y el mundo, y con la intención de apoyar al aprendizaje permanente, se ha habilitado el presente microcurso que presentará las bases de la biología celular, para identificar la clasificación de las células según su origen y estructura.